Un estallido seco y duro rasgó el aire, desperté de un profundo sueño con una extraña sensación de amargo vacío en el estómago, que no conseguí aplacar ni con las fontaneda…
Serían alrededor de las 9 de una mañana de disputas entre el sol y las nubes… sábado, 30 de diciembre de 2006… dios, cómo pasa el tiempo! en nada estaremos de nuevo comiendo las uvas, intentando no atragantarnos con la llegada de un deseable feliz año nuevo…
Ahora reinan amenazadoramente las nubes y el eco sin vuelta enredado en mi estómago ya cobró sentido… volvió ETA, si es que en algún momento se había ido, una furgoneta estalló en Barajas en su nombre. Volvió y tiró por tierra ilusiones, fe, paciencia, garabatos de paz, negociaciones… regresó y trajo crecidos los rencores, los yatelohabíadicho, concedió de nuevo la razón a aquellos que tampoco quieren buscar otros caminos que no sean la violencia de gestos o de palabras.
Qué difícil avanzar, crear, construir. Qué fácil retroceder, conservar, destruir…
Se nos va otro año y todo parece que seguirá igual, me sé el resumen de las noticias del mundo sin leer nada… la inercia nos lleva a la hecatombe y parece que no encontramos freno.
Estoy triste, confusa y me siento bastante impotente… sin serenidad para juzgar si la soga que le pusieron al tío malísimo ese, está bien o mal… «bien o mal» … que lucha genera en nuestro interior la decisión de a qué o quién corresponden tales términos.
Pero a pesar del profundo vacío que me producen sus ecos, encuentro esa fuerza que me empuja a conseguir una luz por pequeña que sea, que desvele que hay más caminos, más opciones, más sentidos…
Enciendo una vela, una sonrisa, un abrazo, reparto besos, guiño un ojo al presente en señal de complicidad, todos somos uno… lo siento en mi propia carne, en el alma que quiere volar lejos y entender lo que parece incomprensible… creo en el mundo, en la vida, en quien me entiende y en el que no… creo en una conciencia mayor a la que no llego, pero intuyo… no tiene que ser tan difícil… no debería de serlo…
Llega un año nuevo, mi alma con todos los que buscan, para que encuentren, con los que están parados, para que anden, con los que quieren entender, para que hallen respuestas, con los que creen que ya lo saben todo, para que rompan ese límite. Mi alma con el mundo… en una apuesta por la unidad, por el crecimiento personal que nos permita reconocer y disfrutar de lo que es tan evidente… que somos uno.
Amor para todos.
vueltasdetuerca 
Somos uno… que bello, que sencillo, que real. Feliz año nuevo, andas madurando baby.
Somos uno… pero la masa, cuando nos juntamos y actuamos realmente como uno perdemos la conciencia, los valores, los criterios, el amor, el odio…nos volvemos muñeco..un muñeco al que es fácil manipular las emociones…y volvérselas del revés cada dos minutos….
Somos muchos, pero cuando nos unimos buscamos una cabeza pesante, dirigente y los demás somos brazos ejecutores sin talento..incapaces de juzgar por uno mismo…ni de diferenciar lo que sentimos de lo que estamos haciendo…la responsabilidad se diluye entre todos y nadie se siente parte.
Qué bello, sí. Pero qué sencillo…no, es sencillo de pensamiento, imposible de ser real mientras exista ¿libertad? o más conciencia personal que social, mientras nos miremos cada uno nuestro ombligo y no el del mundo…mientras realmente el amor que problama Anso sea un valor que se adjudica a las personas débiles, blandas y sensibles…Si apenas oyes la palabra amor!!! como mucho hablamos de «querer» y, sin embargo, parece ser el secreto de todo: para tenernos en cuenta, para pensar en el otro, para cuidar a las personas y al mundo, para anular sentimientos negativos, para vivir intensamente, para no tener miedo a desaparecer…para ser UNO.
Amor para todos
para poder sumar hay que ser uno, completo, que aporte, que no forme masa…que tal y como dice Bruce Lee… sea la masa…
solo adjudican el amor a las personas blandas los que se llaman fuertes, porque saben que esa es la llave de su derrota.
Feliz año nuevo para todos y para cada uno.
😉